Discurso de bienvenida: Inter-ENES
13 noviembre, 2025Por: Daniela Trujillo Súarez*
Uú, Yucatán, a 7 de noviembre del 2025.
Reciban un saludo con especial ánimo, en particular quienes han viajado desde lejos para acompañarnos en este encuentro de nuestras escuelas de educación superior. Saludo también a la comunidad docente, académica y administrativa de todas las entidades. En nombre de la ENES Mérida, les doy la más cordial bienvenida y deseo que mis palabras encuentren eco en ustedes, pues he intentado expresar en este breve discurso algo del sentido universitario que nos reúne y atraviesa a todos y todas aquí presentes.
Al pensar en la voluntad vinculante que nos hace coincidir, viene a mi mente la explanada central de nuestro campus en Ciudad Universitaria: cuyo centro fue pensado como espacio de convergencia de la comunidad universitaria y, también, del conocimiento universal que esta representa. Lo anterior me lleva a pensar en el origen mismo del concepto ‘universidad’. Si descomponemos la palabra universitas —del latín unus (uno), vertere (girar, volverse) y el sufijo -tas (cualidad)— obtenemos literalmente la “cualidad de volverse hacia uno”. Universidad comparte así su raíz con universo y universalidad.
Y con ello no aludo a una masa homogénea e indiferenciada, sino una rica en contraste y matices, en pluralidad intelectual y de opinión. Lo que es finalmente otra forma de decir espíritu universitario. Un espíritu que no está contenido por muros ni por edificios, sino que vive en el corazón de todas aquellas personas dispuestas a la honestidad intelectual, al diálogo, que es lo que en verdad abre brechas, bifurca senderos y transforma a la sociedad desde sus entrañas.
Así, con la fuerza de nuestras ideas y la energía de nuestras convicciones cada estudiante, cada docente, cada parte involucrada en este menester que sostiene con valentía su curiosidad, su talento y su esfuerzo, se convierte en una potencial fuerza que trasciende su alrededor.
El cometido que tenemos ahora, me parece ––ante un panorama desolador de violencia en el país y en el mundo entero––, es hacer efectivo ese espíritu que la universidad nos convoca. Uno de los escritores más influyentes del siglo XX, y premio nobel de literatura, Alexander Solzhenitsyn, alguna vez dijo que “la salvación del colectivo reside en la voluntad de cada individuo”. Hoy podemos leer esta frase en el contexto de nuestra universidad, porque más allá de la grandeza del instante fugaz, la Universidad Nacional Autónoma de México como unidad, siempre han tenido en la base a las individualidades que se aglutinan con un mismo propósito. No importa que tan perdido pueda parecer el panorama, si en alguno de nosotros o nosotras todavía queda algo del ánimo universitario, científico y humanístico. Como estudiante de Desarrollo en Gestión Interculturales e Historia del Arte en las Escuelas Superiores de Mérida y Morelia, y como representante del área de humanidades no puedo sino recordar lo que un profesor me dijo en una de las primeras clases que sostuvimos en este mismo salón: Humanidades ––Geisteswissenschaften en Alemán–– se traduce como ‘el sitio donde se conoce el espíritu’, es por ello, que exhorto a que este encuentro sea un espacio donde la diversidad no divida, sino multiplique; donde la disciplina se encuentre con la creatividad; donde la universidad —esa cualidad de girar hacia uno— se haga visible en el respeto, la curiosidad y el entusiasmo de cada instante.
Bienvenidos y bienvenidas. Que estos días sean de memoria y descubrimiento, de inspiración y encuentro a través del ejercicio académico, artístico y deportivo, y que al irnos, llevemos con nosotros no sólo conocimiento, sino la certeza del deber que nos convoca el ser parte de la universidad más grande de México.
Gracias.
Geistes- espíritu
wissen- conocimiento
schaften- sitios
El sitio donde se conoce el espíritu
* Daniela Trujillo es alumna de la Licenciatura en Desarrollo y Gestión Interculturales de la ENES Mérida y de la UNAM y adicionalmente estudia Historia del Arte en la ENES Morelia.


