Abordando el riesgo de las enfermedades tropicales desatendidas

Abordando el riesgo de las enfermedades tropicales desatendidas

19 abril, 2023 1
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Por: Ángel Arenas y Patricia Dzul*

Las enfermedades tropicales desatendidas (ETD) son un grupo heterogéneo de 20 enfermedades, prevalentes principalmente en áreas tropicales, que afectan a más de mil millones de personas pertenecientes a comunidades empobrecidas (OMS, 2023). Estas enfermedades han recibido históricamente un mínimo, si no es que nulo apoyo económico para su investigación y desarrollo de tratamientos que logren controlar su afección en las poblaciones afectadas, provocando que dichos grupos sigan siendo vulnerados por éstas. Las farmacéuticas no se han visto interesadas en investigarlas dado que no representan un “problema global” que pueda tener grandes retribuciones económicas, a pesar de que existen aproximadamente 100 millones de personas afectadas por estos padecimientos, que, si bien tienen bajo porcentaje de mortalidad, también tienen alta carga en años perdidos por la enfermedad.

Es por esto que Hugo Ferpozzi analiza cómo han surgido asociaciones de participación público-privadas en el contexto de las ETD, y específicamente, cómo se transforman las lógicas y los espacios de producción de conocimiento en donde se investigan estas enfermedades, tema que presentó el pasado 29 de marzo en el ciclo Enfermedades infecciosas y emergentes desde la perspectiva CTS del Seminario Tecnociencia, Ambiente y Sociedad. Según el conferencista, en respuesta a esta falta de participación de
instituciones privadas empieza a surgir un mayor rol de actores inter o gubernamentales, como las ONG de salud global, sociedades filantrópicas locales o universidades, en la producción de conocimiento, que da pie a la creación de asociaciones con entidades privadas con metas compartidas en materia de desarrollo de productos biofarmacéuticos u otros objetivos de intervención en el área de la salud.

Sin embargo, se presentan problemas éticos como la transparencia en las investigaciones o la explotación de estos conocimientos por parte de las empresas privadas bajo la retórica de responsabilidad social empresarial, pero también salen a relucir problemas en cuanto al financiamiento y a las agendas del sector privado. Para Ferpozzi surge una suerte de paradoja aparente de estas asociaciones, en donde se ven en aumento los avances en la producción de conocimientos sobre las ETD, pero también en la vigilancia sobre las poblaciones provenientes de zonas endémicas.

La pregunta que se abre es si este fenómeno podría ser contraproducente, ya que se percibe cierta absorción de responsabilidades y de agencia de las enfermedades, y resulta peligroso dejarle al sector privado la responsabilidad por desarrollar soluciones, pues dicha investigación estará guiada por intereses económicos y no sociales, perpetuando de esta forma las desigualdades entre países. Esto debido a que las EDT solo consiguen un reflector de atención hasta que logran traspasar al norte global, es decir, a aquellos países que sí resulta “importante” proteger.


Ángel Arenas y Patricia Dzul son alumnos de la Licenciatura en Desarrollo y Gestión Interculturales de la ENES-Mérida, UNAM